¿Dónde están?

En medio del inmenso lugar….todo está inundado de un eco que rebota en todos lados pero que es nada. Eco vacío que acompaña falsamente y ayuda a disipar pensamientos… distrae mientras respiro entre la congestión de algo de mentiras.

Pero siempre llega el momento de estar sentada al lado de una lámpara que alumbra tenue, dentro de una cobija fría que se va calentando con mi ser, con el estómago medio vacío y todo retorna como si hubiera querido salir desde hace mucho tiempo, sale disparado todo aquello que se volvió invisible o más bien insensible, en algún momento. Retorna porque es lo que existe de verdad y me doy cuenta de ello. Agacho la cabeza y mis ojos no pueden mantenerse en su lugar como es debido y se empapan enfriando aún más mi cobija y de paso mis mejillas calientes de alguna enfermedad, como siempre.

Entonces no sé qué es más triste, saber que de todos modos todo va a retornar una y otra vez o la sensación que me acompaña noche tras noche.

Sonrío por que es mejor y más saludable, suspiro tristeza… pasito para que nadie se de cuenta y de hecho nadie se da cuenta… y adentro, adentro todo es como el papel del escritor que se arrepiente de sus letras y tiene una caneca inundada de errores.

No sé de qué despedirme de todos modos. Tampoco sabría a qué darle la bienvenida
A dónde corro a toda velocidad si ni siquiera reconozco el mundo en donde pongo mis pies cada vez que me levanto, ya no. ¿En dónde estoy? O ¿en dónde está? ¿Dónde está eso que es de verdad para mí? ¿A dónde se fue? ¿Por qué me lo han quitado? ¿Quién fue? ¿Qué hice? ¿Qué hice???? Todo se volvió de “mentiritas” como dicen los niños.

¿Dónde me hago mientras tanto? Parece que fuera yo la que me estuviera volviendo de mentiras.